A ti, mujer que te veo sin fe.
A veces, cuando sueño despierto, que la mirada se pierde y no veo ya lo que ven mis ojos sino lo que mi mente dicta… lo deseo tanto y tanto lo deseo, que tal vez… chance y no más… hay un momento que estoy seguro que esta a punto de pasar… de lograrlo, tan solo con pensarlo… por un segundo creo ver que puede suceder.
Ese insignificante momento bautizado segundo, hace que la espera valga la pena.
2 comentarios:
Excelente!!!! Dicen que la esperanza es lo último que muere y eso es lo que muchas veces nos motiva y hace seguir adelante...creer lo suficiente para provocar que las cosas sucedan...a veces no resulta como esperamos, pero aprendemos, seguimos adelante y con mayor madurez y fuerza.
Si el diseño de tu blog no estuviera tan escandalosamente horrible, leeria todo lo que escribes, porque creo que no lo haces mal.
Pero ese fondo le da en la madre a cualquier buena intencion con la que uno pudiera venir.
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