Soledad afligida [ Poesía v5.0]

Niña, ándate forzando una sonrisa en el espejo, búrlate de la tristeza un rato, después tristéa lo que quieras, lo que sea necesario, pero ríe, ríe aunque sea una vez, que si la tristeza hoy es tu alimento, agua risueña no te falte para evitar un atragantamiento.

Que tristes y solitarias fechas estamos pasando.

Estos segundillos parece ser que no se cansan, y la esperanza que tanto se desgasta estos días. Y mi sueño que no puedo apartar de ti.

Aunque los días andan soleados, la frialdad de la noche solitaria no me ha dejado en paz. No acepté el cobijo del olvido ni del desamor, me he acurrucado con la pequeña sabana de esperanza, y un pedazo de cobertor que quedó de tu recuerdo.

Enrédate con mi recuerdo, buenas noches a la Luna y gracias al sol. Desfilen rápido, estos días más que nunca, no sean perezosos como otros días agradecidos a su lado. Ha sido tan raro quedar rendido en la cama mirando la Luna, y despertar rodeado de obscuridad.

La imaginación no ha dado para no extrañarte, el cuerpo no resiste lamentarse. El alma duele de acordarse y mis manos duelen porque las dejaste.

Saberte triste me roba el aliento, me agita el pulso, arremete contra mis lagrimales. No estés sola, aquí estoy yo, pero mi corazón esta contigo, se prendió de tu cabello cuando partiste, le susurró a tu oído y vive dentro de ti, tú le das vida… y él me la da a mí.

Regálame un beso, no estés sola, vente conmigo, vive en mí.

Róbame otro beso, no me dejes solo, llévame contigo, déjame vivir en ti.

Siénteme