Estrella Fugaz


Una vez me atraparon tus ojos,
me perdí en tus labios que reían,
le temí a tus manos que huían
y soñé tu ser inexplorado.

Una vez entré por tus ojos,
probé tus labios que besaban,
tomé tus manos que jugaban
y anhelé tu ser que se asomaba.

Una vez escuché tus ojos,
observé la voz de tus labios,
respeté el espacio de tus manos
y gocé tu ser que empezaba a conocer.

Una vez escapé de tus ojos,
sufrí el discurso de tus labios,
alejé el fuego de tus manos
y me enamoré de tu ser que se desvanecía.

Ésta vez tu mirada no me hipnotiza,
tus palabras no me quitan la calma
y tus manos no me llaman,
es tu ser lo que me deslumbra e inquieta mi alma.

¡Una estrella fugaz!
Cierro los ojos y pido un deseo,
cuando los abra y se haya ido...
espero encontrar lo que tanto anhelo.

Repentina de domingo



Encontré un botón tirado en el suelo, estaba descansando en la tersa textura del fondo de mi alma cuando lo encontré... no sólo dejaste esa parte de tu blusa en mi, dejaste una foto en blanco sobre el buró de mis recuerdos, una peineta rosa en el cajón de los calcetines de mis ganas, demasiados sueños en cada una de las almohadas donde duermen mis anhelos, el sabor de tus labios en los míos, el aroma de tu rostro en mis manos y el sonido de tu risa en lo profundo de mi ser.

Quiero pedirte que te dejes abrazar, que vengas una vez más y de mi mano me acompañes a caminar... pero me arrepiento cuando razono y recuerdo que de cualquier modo, al final del día te vas a retirar.


Pudimos haber sido el amor de nuestras vidas, pero no me atreví a tomar las riendas… no te atreviste a levantar los ojos y cruzar nuestras miradas.

Que tomen nota el Sol, el mar, la Luna y las estrellas... también los ángeles que aprendan:
Somos simples mortales, si quieren perfección, miren a su alrededor... solo Dios es perfecto.